Con cerveza artesanal, lima y nuestra receta secreta de especias y salsas.
Ligeramente picante, lo suficiente para aportar carácter, pero no tanto como para que te haga sudar.
CÓMO SERVIR
La Michelada se disfruta bien fresca (lo dice su propio nombre, “mi chela helada”), así que te recomendamos guardarla en el frigorífico. Michelada Malinche no necesita hielos, pero cada uno se la sirve como quiere; no te cortes en tomarla como más te apetezca. De todas maneras, aquí te pasamos un par de sugerencias:
1 · QUIERO MI MICHELADA Y LA QUIERO YA
Abre la botella. Mete una rodaja de limón o lima. Bebe. Repite si es necesario.
2 · NIVEL MAESTRO aka “LA MICHELADA PERFECTA”
Vierte sal gorda y/o tu mezcla preferida de especias en un plato llano. Humedece el borde un vaso de boca ancha con un gajo de limón o lima. Posa el vaso boca abajo en el plato hasta que el borde se impregne de sal. Echa la Michelada en el vaso y añade el gajo. Si te gustan con carácter, añade unas gotas de tu salsa picante favorita. Huele. Bebe. Paladea. Mmmm…
Comparte
This is a unique website which will require a more modern browser to work!